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Elementos
Los arquitectos siempre hemos tratado de formular un discurso teórico en el que apoyar nuestra práctica profesional, sabedores de que una práctica sin teoría cae en la rutina, en algo ciego, de igual modo que una teoría sin práctica está abocada a la utopía, a algo estéril. Si la teoría es el discurso, la práctica son las obras y como bien argumentaba Carlos Martí Arís, “en nuestro ámbito profesional todo intento de construcción teórica debe asumir de entrada un papel auxiliar, de condición secundaria, supeditado a las obras, verdaderas depositarias del conocimiento”.
Ese conocimiento que acumulan las obras nos llega, como una herencia a través del tiempo, en el empleo de innumerables `elementos arquitectónicos´ que se han ido sofisticando y adaptando a los nuevos usos y a los avances tecnológicos. Los arquitectos necesitamos de ese conocimiento y, sobre todo, de la reflexión personal sobre esa cantidad de elementos que invariablemente formarán parte de nuestros proyectos. Son elementos y conceptos que forman parte de las obras de todos los tiempos y que, de algún modo, interpelan nuestra capacidad creativa para seguir añadiendo nuevas evoluciones, para aportar significados nuevos a cosas que ya estaban.
Con ese anhelo de repensar la práctica arquitectónica desde lo básico y lo fundamental, lanzaba por ejemplo Rem Koolhaas su propuesta expositiva `Elements of Architecture´ para la Bienal de Arquitectura de Venecia de 2014, en la que identificaba quince elementos que están presentes en todos los edificios (como pared, ventana, balcón, pasillo, baño...), para analizarlos y proponer su reconstrucción individual y la creación de una nueva perspectiva sobre cada uno de ellos.
Con ese espíritu iremos tratando en este blog sobre algunos `elementos de arquitectura´ que hemos ido utilizando en los distintos proyectos de SA y que, en su momento, han supuesto un motivo de reflexión y un intento de aportar algo en el contexto concreto de cada obra.